Otro trabajo terminado
Los que trabajamos en los entornos de las EDAR sabemos lo complicados que son.
La corrosión,
el manejo de cargas pesadas,
los mantenimientos periódicos…
Son instalaciones especialmente complejas.
Por eso, al trabajar para una EDAR no es suficiente con tener en cuenta los requisitos técnicos.
También hay que prestar atención a la durabilidad y la seguridad de los equipos.
Y para muestra, un botón.
Después de un año de trabajo, hemos completado la instalación de todos los equipos en la EDAR de Albacete.
¿Ha sido fácil?
Ya imaginarás que no.
La última fase del proyecto ha pasado por una inspección rigurosa y muy exigente.
Así nos aseguramos de que todo está en su sitio antes de dar el visto bueno final.
En las imágenes, puedes ver el montaje del puente grúa en la sala de pretratamiento y del polipasto de cadena curvo en la sala MBR.
En la sala de pretratamiento, hemos instalado un puente grúa preparado para resistir las condiciones corrosivas y facilitar las labores de mantenimiento.
Y en la sala MBR, donde los espacios son más reducidos, optamos por un polipasto de cadena curvo.
Es la mejor opción para asegurar una mayor precisión en el manejo de cargas y facilitar el trabajo diario.
La seguridad y la eficiencia son prioridades en cualquier industria.
Pero en las EDAR, aún más.
En ellas, no solo debemos tener en cuenta la seguridad de las personas y los equipos (reduciendo el riesgo de accidentes).
También debemos garantizar una durabilidad de los equipos que trabajan en condiciones ambientales complejas para la resistencia de los materiales.